La incorporación de múltiples sistemas semióticos en un mismo poema es ya un lugar común en la poesía actual. La tendencia a la hibridez y semantización de géneros y medios tecnológicos, apoyada en un uso versátil y creativo de las tecnologías digitales ha generado una escritura multimodal y transgresora que se aleja en muchos aspectos de la poesía discursiva convencional basada en la secuencialidad verbal y una autoría fija. Las nuevas tecnologías tienen la capacidad de fomentar una comunicación colaborativa, de carácter público e interactivo al descentralizarse y emanciparse de los medios físicos tradicionales. Entre otros factores, la transgresión de códigos y la comunicación dinámica y de carácter integral, estimulan a su vez la creación de nuevos paradigmas cognitivos y de lectura. No se debe olvidar que la poesía visual, digital e intermedial emana de varias tradiciones literarias; la tradición clásica verbal, la logocéntrica y la tradición interartística y rupturista de vanguardias que también se nutre del lenguaje visual, sonoro y cinético de la cinematografía. Si a esto le añadimos las posibilidades de las nuevas tecnologías conseguimos una escritura con signos (auto)referenciales que genera silencios e interferencias comunicativas, mensajes metapoéticos, políticos, personales, etc. El lector participa de un nuevo sistema de comunicación intersubjetivo, social y personal que participa de la multimedialidad y de la interacción. Dentro del espectro de lo estrictamente literario como en sus extremos o desviaciones, existe una amplia gama de escrituras poéticas irreverentes y creativas, dignas de estudio, caracterizadas por un alto nivel transgresor, testimonial y que se resisten a cualquier intento de domesticación y clasificación. Que los poetas elijan el exilio de los signos verbales no implica necesariamente un alejamiento de lo poético como se puede ver en la poesía cubana de Francis Sánchez, Carlos A. Aguilera o en la poesía de Fernando Millán, Joan Brossa, Ignacio Gómez de Liaño, J. M. Calleja, entre otros muchos poetas anteriores a la nueva generación milenial (influencers) y a la tuiteratura.